Atención con los bordes del Parque de la Naturaleza de Cabárceno

De esos lugares que visitas y te encantan pero te pasa algo y siempre lo vas a recordar por lo que te ocurrió. Pues eso nos pasa a nosotros con el Parque de Cabárceno.

El Parque de la Naturaleza de Cabárceno es un sitio que si vives en el norte de España visitas sí o sí. No es un zoo habitual, sino que es un estilo de zoo al aire libre donde los animales están en semilibertad y tienen bastante espacio para moverse. Es un parque perfecto para ir a pasar el día donde disfrutar tanto niños como mayores.

Cabárceno se encuentra en el valle de Pisueña a 17 kilómetros de Santander. Antes de ser parque, eran unas minas de mineral de hierro que se cerraron y en 1990 fue inaugurado como parque de la naturaleza. Es un parque de gran extensión con más de 750 hectáreas y 25 km de carretera que el visitante puede recorrer en coche o a pie disfrutando del paisaje kárstico.

Después de recorrer Cantabria durante el puente de mayo, nuestro plan era de dominguero total, pasar el día en Cabárceno y por la tarde volvernos a Madrid. Con la suerte de que hacía un día estupendo llegamos al parque, pagamos la entrada, cogimos el mapa y decidimos la ruta que íbamos a hacer con el coche. Cosa que os recomendamos que hagáis ya que no sé si daría tiempo a recorrerlo a pie con lo grande que es. Aunque también ofrecen circuitos de senderismo por ciertas zonas si os interesan.

Vistas - Parque de Cabárceno

Dentro del parque hay restaurantes y cafeterías que ofrecen menús y bocadillos donde podéis comer. En nuestro caso, llevamos el bocadillo preparado para comer en una de las varias zonas de picnic que hay; así que fuimos tranquilamente visitando a los diferentes animales y leyendo sus historias. Además, hay varios miradores desde los cuales se puede apreciar una fantástica panorámica de la bahía de Santander y del entorno natural que rodea el parque.

Vistas Santander - Parque de Cabárceno

Encontramos especies de los cinco continentes: Osos, tigres, leones, canguros, jirafas, monos, cebras, rinocerontes, hipopótamos, hienas, ciervos, bisontes, lobos, serpientes, aves… y muchos animales más. Pero hubo un animal al que le cogimos manía.

Y os preguntareis ¿Por qué van a coger manía a un animal? Bueno en realidad al animal no, sino al recuerdo de lo que nos pasó cerca de él.

Ya estábamos terminando el recorrido y nuestro último punto era la zona donde habitan los elefantes, así que llegamos y con la pena de que ya poníamos fin a la ruta de los animales, de repente sonó un psschhh mientras estábamos aparcando... ¡se nos acababa de pinchar una rueda!

Estábamos solos en el parking y teníamos que poner la rueda de repuesto, de esas que solo puedes ir a “x” km/h con la que teníamos que llegar hasta Madrid. Enseguida se nos acercaron unos jardineros del parque a ayudarnos y les preguntamos por talleres donde comprar una rueda nueva, que no tenían ni idea por esa zona. Así que tuvimos que salir pitando del parque y recorrernos varios pueblos buscando un taller abierto en el puente de mayo. Parece mentira pero sí, lo encontramos y conseguimos la rueda para poder volver a casa después de pasar la tarde dando vueltas para encontrar el taller... ¡qué suerte!

Zona de los elefantes - Parque de Cabárceno

Así que ya sabéis cuando visitéis el Parque de la Naturaleza de Cabárceno ¡cuidado con los bordillos! ; ) 

Aquí os dejamos la visita virtual que ofrece la página web oficial del Parque de Cabárceno para que os entren más ganas de conocerlo en persona.